Enseñando a los niños el placer de la lectura

Cuántos hemos escuchado la idea de que leer es tedioso, aburrido o que lleva mucho tiempo, resulta ser más entretenido ver la televisión o una película, lo cual no desacredito pues ni todos los programas de TV son solo propaganda, ni todas las películas son malas en su contenido. Sin embargo, leer debe ser una actividad entretenida, un pasatiempo, un gozo.

Nuestro cerebro debe ser ejercitado y mantenerse sano al igual que todos los órganos y/o músculos de nuestro cuerpo. ¿Cómo es esto? Hay que ayudar a nuestro cerebro a mantenerse saludable y esto se puede lograr con la LECTURA. Al leer ejercitamos la memoria, la imaginación, se incrementa la rapidez de la respuesta y de ordenar ideas, además se puede lograr un mejoramiento de nuestra capacidad intelectual.

En los niños crea empatía, habilidad de escuchar, de expresarse, apreciación del arte, del dibujo, desarrolla un sentido crítico, se estimula la vista, las emociones, ayuda a socializar, los BENEFICIOS pueden ser INCALCULABLES y perduran para toda la vida.

Lo mejor es que no se necesita ser adulto para gozar del placer de la lectura, sino por el contrario hay que inculcárselo a los más pequeños, pues un hábito adquirido desde temprana edad perdurara a  través del tiempo, hasta la vida adulta.

El interés por la lectura se puede inspirar a los niños desde su nacimiento, ¿cómo es esto posible? Enseguida se enlistarán algunos consejos para ello:

1. El bebé debe escuchar historias lo antes posible, contarles cuentos de acuerdo a su edad, acompañados de sonidos (hechos por los libros o por la persona que está leyéndolos).
   
2. Hacer uso de títeres, muñecos, animales, peluches, que puedan ser utilizados como personajes del cuento, esto aumentará el interés, la emoción y el agrado por la lectura, pudiendo crear así un hábito.
3. Describirle las imágenes, los colores, los sonidos; cuando el niño aprenda a hablar puede repetir lo que le describes y posteriormente puedes hacer uso de un libro de vocabulario, con esto podrá visualizar las imágenes con las palabras. Cuando este más grande haz uso de libros con texto.
4. Se debe motivar y valorar cuando el niño está leyendo, haciéndole cumplidos de lo bien que lee, realizándole preguntas de lo que entendió y mostrando interés en los temas en los cuales él está interesado.
5. La lectura debe ser persistente y de preferencia se debe contar con una hora específica para ello, por ejemplo antes de dormir o después de comer.

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